Ejemplos de fortalezas y debilidades de una persona

Todas las personas contamos con una serie de virtudes y capacidades, pero también de defectos y carencias; un conjunto de cualidades que conforman nuestra personalidad y cuya valoración suele ser muy subjetiva -siempre habrá alguien que valore de forma positiva lo que a nosotros nos parece un defecto, y viceversa-. Dado que las fortalezas y debilidades de una persona pueden ser abordadas tanto desde la perspectiva personal como corporativa, vamos a repasar los ejemplos más característicos de cada una de ellas.

Índice

¿Qué son las fortalezas y debilidades de una persona?

Las fortalezas y debilidades son el conjunto de rasgos positivos y negativos, respectivamente, de un individuo; es decir, los puntos fuertes y débiles que tiene una persona a nivel personal o profesional (dependiendo del contexto en el que nos encontremos).

Deteniéndonos ahora en el plano profesional, se entiende que las fortalezas son las características de los trabajadores que satisfacen las expectativas de la empresa (por ejemplo, la productividad o la persuasión) y las debilidades, aquellos rasgos de la personalidad que no llegan a los mínimos exigidos (por ejemplo, la indecisión o la falta de eficiencia en el trabajo).

Tan importante es esta distinción en el mundo laboral, que suele ser habitual tener que responder a la pregunta sobre los puntos fuertes y débiles en la entrevista de trabajo como primera criba para ser contratado.

¿Cómo aprovechar tus talentos y mejorar tus debilidades?

Para aprovechar tus talentos y mejorar tus debilidades, te recomiendo los siguientes pasos:

Identifica tus talentos: Piensa en aquellas habilidades o actividades que te resultan más fáciles o te hacen sentir más realizado. Estos son tus talentos.
Aprende más sobre ellos: Investiga y aprende todo lo que puedas sobre tus talentos. Asiste a talleres, lee libros y mira videos para mejorar aún más tus habilidades.
Practica regularmente: Practica tus talentos con regularidad para mejorarlos aún más y mantenerlos afilados.
Identifica tus debilidades: Identifica las áreas en las que tienes más dificultades o en las que te gustaría mejorar.
Busca recursos para mejorar tus debilidades: Investiga y aprende todo lo que puedas sobre cómo mejorar tus debilidades. Busca cursos, talleres, libros y videos que te ayuden a mejorar.
Establece metas realistas: Establece metas realistas para mejorar tanto tus talentos como tus debilidades.
Celebra tus éxitos: Celebra tus éxitos, incluso los pequeños logros. Esto te ayudará a mantenerte motivado y a seguir avanzando.

Recuerda que no se trata de ser perfecto en todo, sino de mejorar continuamente y aprovechar al máximo tus talentos.

Características de las fortalezas y debilidades de una persona

La primera, y la más importante, es que el concepto de fortalezas y debilidades es completamente subjetivo. Lo que en una situación determinada puede considerarse algo positivo (por ejemplo, mantenerse al margen y no inmiscuirse en los asuntos ajenos), en otro contexto puede tacharse de "falta de actitud". Todo depende del prisma que empleemos para valorarlo.

Las fortalezas y debilidades de un individuo son mutables; es decir, pueden evolucionar o involucionar con el tiempo. Por ejemplo, yo puedo trabajar para ser una persona más empática (virtud), pero también puedo transformarme en alguien intransigente (defecto) con el paso del tiempo.