El concepto de demagogia o discurso populista hace referencia al tipo de estrategia política que se suele emplear para ganar adeptos en torno a una idea o programa político, y la reflexión pertinente sobre su significado está incluida en el Pensamiento Aristotélico. ¿Pero qué quiere decir la palabra demagogia con exactitud y cuáles son los ejemplos más habituales que podemos encontrar en el mundo de la política? La respuesta que necesitas, a continuación.
Índice
¿Qué es la demagogia?
La demagogia, término que tiene su origen en la Antigua Grecia, es una idea o estrategia política que consiste en apelar a las emociones del ciudadano (sentimientos, odio, inseguridades, miedos, deseos) para conseguir el apoyo popular. El uso de la retórica y el discurso propagandista es una estrategia muy habitual entre las personas demagogas, tanto si pertenecen al mundo de la política como si no.
Características de la demagogia
Para que un discurso sea considerado demagogo y populista (independientemente de que tenga lugar en el plano político o en la vida cotidiana) debe cumplir alguno de los rasgos característicos que enunciamos a continuación:
- El principal objetivo del discurso populista es convencer y atraer a los demás en pro del interés propio.
- Las personas demagogas ganan el apoyo popular apelando a los sentimientos de los ciudadanos y usando fórmulas como la retórica, la propaganda y la desinformación.
- Según el filósofo Aristóteles, la demagogia es la versión corrupta de un país democrático, en el que se aprovechan de las clases más desfavorecidas.
- El discurso demagogo distorsiona el contexto histórico, político y/o económico en su propio beneficio.
- El político demagogo instrumentaliza la revolución política para sus propios fines personales.
Ejemplos de demagogia
Aunque ya hemos mencionado algunos de los recursos más habituales en el discurso demagogo, no está de más que conozcamos las particularidades propias de este tipo de estrategia:
- Las falacias; es decir, los argumentos que parecen válidos pero que son empleados para conseguir un determinado objetivo.
- La manipulación del significado del discurso, que es despojado de su contexto original.
- Las tácticas de despiste empleadas por la persona demagoga para "llevar a su terreno" a otra persona.
- La demonización de una idea, persona o grupo de personas, de manera que este conjunto sea visto negativamente por la sociedad.
- La redefinición del lenguaje; o lo que es lo mismo, desvirtuar o eliminar las ideologías que sean contrarias al objetivo principal de la persona demagoga.